Los pasos que los pintores deben seguir durante su formación, incluida la copia de las obras de los grandes maestros, fueron uno de los temas más debatidos en la literatura artística del Renacimiento italiano. Leonardo da Vinci (c. 1452-1519) tenía puntos de vista contradictorios sobre el tema, pero permitió que sus estudiantes reprodujeran, cada uno en su propio estilo, no solo sus pinturas y dibujos, sino también sus ideas. Basado en el ejemplar de Mona Lisa conservado en el Museo Nacional del Prado, este libro analiza éste y otros temas relacionados con las prácticas de taller de la artista.

La obra incluye tres ensayos de Vincent Delieuvin, Ana González Mozo y Philippe Walter que revelan reflexiones recientes y planteamientos teóricos y científicos que nos han permitido profundizar en los procedimientos pictóricos de Leonardo, su figura como maestro, la forma en que sus discípulos asimilaron sus enseñanzas o significaba imitar la naturaleza para él. La publicación también incluye dos análisis únicos, de Diego S. Garrocho y Juan de Oñate, del pensamiento de la mimesis y su impacto en el Renacimiento italiano y la extraordinaria fama alcanzada por la Mona Lisa en el Louvre a principios del siglo XX, tras su robo en el Museo.