Angela Merkel se retiró hace seis semanas y acaba de mudarse con su esposo, el guardaespaldas y su copa Putin a una región poblada pero encantadora dentro de Alemania. Acostumbrada a una vida turbulenta que la ha obligado a enfrentarse a duros líderes mundiales, extremos y alrededor de tres mil fiestas estatales, ahora le cuesta concentrarse en la tranquilidad del campo. Hacer pasteles y caminar por el camino va a ser un aburrimiento total.

Cuando muere un señor de la zona, Angela se enciende: al final se encuentra con una situación que necesita ser resuelta y exige toda su información. El barón fue encontrado en su castillo, la habitación estaba cerrada por dentro … y hay seis sospechosos.