El Mediterráneo fue una de las áreas de mayor influencia de Napoleón. Con territorios en España, Italia y, por supuesto, Francia, el reinado de Napoleón estuvo a la vanguardia del Gran Mar durante gran parte de principios del siglo XIX. El ‘Mediterráneo napoleónico’ consistía en casi todas las tierras europeas occidentales que limitaban con sus costas norte, pero muchas de esas costas se mantuvieron durante una década. El desastroso intento de someter a Egipto en 1798-99 y la rápida pérdida de Malta ante los británicos sellaron sus fronteras este y sur. Ninguna de las posesiones mediterráneas de Napoleón era fácil de mantener; eran asociaciones volátiles que mostraban una resuelta resistencia al nuevo estado creado por la Revolución Francesa. En este libro, un renombrado historiador y biógrafo de Napoleón, Michael Broers analiza las similitudes y diferencias entre las posesiones imperiales de Napoleón Napoleón. Considera el proceso administrativo político, militar y legal, así como los desafíos que enfrentan los prefectos de Napoleón para superar la hostilidad en la población local.
Con capítulos que cubren una variedad de territorios imperiales, este libro es de un valor único para la literatura histórica sobre la Europa napoleónica y el proceso y la práctica del imperialismo.