Las aseguradoras marítimas estadounidenses, ampliamente aceptadas, utilizaron su posición en la cima del comercio mundial para dar forma a la nueva nación. El conocimiento internacional que han acumulado y el capital que han generado les han permitido desempeñar un papel clave en la construcción del estado y el desarrollo económico. Durante la Revolución, ayudaron a EE. UU. a negociar préstamos extranjeros, vender deuda estatal y establecer un solo banco nacional. Posteriormente, aumentaron su influencia prestando dinero al gobierno federal y sus ciudadanos. Incluso cuando los gobiernos federal y estatal invaden su dominio, los aseguradores marítimos se han adaptado, preservando su independencia y autoridad a través de una amplia participación en la formación del derecho comercial. Utilizando su demanda incomparable de experiencia, actuaron libres de la interferencia del gobierno y, al mismo tiempo, se incrustaron en el tejido institucional de la nación. A principios del siglo XIX, las aseguradoras no eran meros evaluadores de riesgos. Eran constructores de naciones y creadores de mercado.

Con una investigación profunda e imaginativa, U.S. Underwriters utiliza aseguradoras marinas para descubrir una brillante historia original de riesgo, dinero y poder en la época de la fundación.